Esos encuentros familiares de Javi

Era domingo y Javi no había quedado de verse con Lalo porque tenía el cumpleaños de su hermano menor, ocasión en la que se reunía la numerosa familia que él tenía, entre ellos José Alberto un primo un año menor. Entre ambos había una química sexual muy fuerte y como vivían en ciudades diferentes casi nunca se miraban y cuando lo hacían siempre se quedaban con las ganas de más.

El año pasado no pudieron tener sexo por que la abuelita de ambos se despertó cuando Javi le hacía sexo oral en el baño y en otra ocasión, ese mismo año, los dos se estaban besando en el cuarto cuando la mamá de Javí entro y casi los encuentra. La primera vez que ambos se dieron cuenta que se gustaban fue hace tres años cuando José tenía 19 años y recién había empezado la universidad donde practicaba Karate por lo que su cuerpo empezada a definirse, como ambos eran de la misma edad siempre compartían el cuarto de Javi. En esa ocasión, Javi pasaba mientras José salía del baño con su pene erecto que se dejaba ver por la toalla puesta, la mirada de Javi se postro sobre el miembro de José y este sólo lo quedo viendo con una media sonrisa en su rostro y con un suave movimiento le señalo la puerta del cuarto.

Al momento de entrar, José estaba desnudo de espaldas mientras las gotas de agua caían por su piel húmeda y este se secaba suavemente, Javi no podía para de ver el bellísimo cuerpo que su primo tenia.

Ohe vos...vestite - le dijo Javi.
José se dio vuelta con su pene erecto y le pregunto: ¿en verdad queres que me vista?.
Pues al verte desde esa perspectiva, pues quédate así...
Y vos? Te quedaras vestido o te desvisto...?
Y eso... - Le pregunto Javi.
No se...pensé que querías jugar un poco o no te gusta?
Pero no podemos...
Por qué no...si entre familia el secreto es más seguro¡¡¡
Luego de cuatro palabras más Javi no pudo contra el pene de José Alberto. su quinta
palabra fue: “Que rica que esta”, mientras le hacía sexo oral.  

Ese año José estaba mejor que nunca y Javi decido a tener sexo con él a pesar de cualquier circunstancia. El tiempo transcurrió entre la música de la piñata y las conversaciones familiares hasta que llego el momento de dormir, Javi y José ya habían planeado su cita a la media noche. Las puertas se cerraron y las luces se apagaron sólo para dejar corre la pasión entre los dos.

Un bici y una mamada...

Era martes 15, Lalo había renunciado a la KoShon por que le salía más práctico vender productos de La Bombom que estar de esclavo en la Zona Franca, además el sábado iría matricularse la U para sacar su ingeniería electrónica. Javí no había dado señales de vida, eso quería decir que estaba muy entretenido con algún hombre, por lo que Lalo decidió irse tranquilito a casa.

Muy a las seis de la tarde, Lalo se estaba montando en la ruta para ir a su casa y a los poco minutos el bus se paro y Jasón, el chofer, se bajo a ver qué pasaba. Uno minutos más tarde subió para anunciar que el bus se había dañado y que debían esperar el siguiente, Lalo se bajo medio enojado pues ya se estaba oscureciendo y el siguiente bus pasaba media hora después, pero le tocaba esperar.

No había pasado mucho tiempo cuando Lalo vio a un chico en bicicleta que se detuvo a escasos de metros de él, quien levantaba la mano como llamando a alguien, pero Lalo no quería
entender que era con él hasta que retrocedió y se paro enfrente.

Y entonces Lalo...no te acordas de mí...soy José Alberto, estudiamos juntos la secundaria...
Pues fíjate que no me acuerdo...lo siento...
Es que sólo llevamos un año...! Y qué haces aquí?
Pues esperar el otro bus...que este se descompuso...
Yo te puedo dar raid en mi bici...ya estamos cerca de la ciudad...
Mmmm...no esta mala la idea...
Subite entonces..

Durante el camino Lalo trataba de acordarse de donde conocía a José Alberto...no era ninguno de los muchachos a quienes les había hecho sexo oral en la secundaria...uno por uno los fue recordando y ninguno se llamaba José Alberto.

Ve...no me acuerdo de donde teconozco...
Que mente más olvidadiza la tuya Lalo...Bueno aunque sólo estuve unos meses y casi no hablaba con nadie...
Por eso es entonces...discúlpame que no te recuerde...
Si...yo una vez te vi mamándosela a un maje...
Jajajaja...donde?
Detrás del aula de moral y cívica... - Le respondió José.
Curioso...y vos querías también...
Jajaja...tal vez...

El camino era oscuro, sólo se miraba un poste de electricidad con una lámpara que iluminaba la carrera. José Alberto se detuvo y tomo la mano de Lalo para que tocará su pene erecto. Ambos
caminaron a un predio oscuro mientras se besaban apasionadamente. Lalo quedo asombrado con la forma del pene de José Alberto, era casi perfecto con una leve inclinación hacia arriba, con un glande hermoso y sin bellos. En medio de la oscuridad, Lalo sólo quería saborear lo que la noche le regalaba mientras que José Alberto gemía de placer.

"El verdadero yo" del novio de Barbie

'Bathroom'

Dina Goldstein habla de su imagen favorita de la serie: "B. y K. se han vuelto 

cómodos...¡Quizá demasiado! Se han relajado y viven vidas independientes, 

pero juntos. Quería mostrar a B. en una posición masculina, en absoluto 

afectada por K. Él continua bañándose alegremente sin prestar atención a B." 

(© 2012 Dina Goldstein / In the Dollhouse)

Texto y Fotos tomadas de www.20minutos.es

En las imágenes de In the doll house (En la casa de muñecas) se palpa la tensión. Ken decide desayunar con unos zapatos rosas de tacón, por las noches lee revistas femeninas y cuando se duerme sueña lo mismo que Barbie, que lo rescata un valeroso soldado: "K. por fin expone su verdadero yo. Ha estado esclavizado por las expectativas sociales y ahora ha encontrado el coraje de salir y revelarse al mundo".

Dina Golstein, residente en Vancouver (Canadá), explora en un proyecto fotográfico los problemas que surgen tras años de convivencia entre la muñeca Barbie y su eterno acompañante Ken, a los que se refiere por sus siglas.

La fotógrafa narra en imágenes una historia que resulta cómica por la popularidad de los personajes, pero que encierra otros significados: "Este mundo es muy complejo y todos tenemos que lidiar con desafíos. Lo que puede parecer perfecto por fuera, seguramente no lo sea".

Barbie se corta la melena

En la piel sin imperfecciones de los protagonistas se distinguen las líneas que separan las extremidades del cuerpo. Sus expresiones contenidas y la esterilidad rosa que los rodea añaden un dramatismo de plástico a las escenas. Durante la transformación de Ken, su célebre novia intenta ignorarlo, hasta que ella lo descubre en el dormitorio con un amante. En la siguiente foto, vestida de hombre, Barbie se corta de modo impulsivo  la melena y después se desencaja la cabeza.

La esterilidad rosa le añade un dramatismo plástico a las escenasGoldstein nunca fue muy aficionada a las barbies —"Me pasaba el día fuera, cazaba bichos y me subía a los árboles", confiesa— pero cuando sus hijas empezaron a jugar con la famosa muñeca, ella comenzó también a prestarle atención.

Ver a Rodolfo agachado fue lo mejor…

Lalo seguía con la incertidumbre de saber que había pasado la noche anterior con Rodolfo, pues a él no le dolía nada, Rodolfo estaba desnudo y había una caja de condones en la mesa. Lalo decidió ir a bañarse para tratar de revivir la memoria y saber que había pasado, Lalo salió del cuarto y se dio cuenta que no había nadie en la casa, camino por el patio tapado con su toalla rosada de Patricio, para llegar al baño. El agua empezó a caer y de pronto se escucho un grito que llamada a Lalo, era Rodolfo.

Ohe Lalo…donde estas? – pregunto.
Acá en el baño…espérame unos minutos que ya salgo! – respondió Lalo mientras se seguía bañando.
Y de pronto, Rodolfo estaba desnudo con una gran erección frente a Lalo y le dijo - Y entonces Lalo…continuamos? - .
El otro perplejo no supo que decir y lo primero fue - Qué hicimos anoche? - .
No te acordas!!! Que bárbaro si que venias borracho. Sabias que yo nunca había hecho eso verdad…
Sí, me supuse…pero decime que fue lo que hicimos…
No queres repetir o no aguantas dos tan seguidos… - le pregunto Rodolfo.
Bueeenoooo…por mí no hay problema, si queras entrar…
Rodolfo entro al baño y se puso de frente a Lalo, que ya estaba firmemente dispuesto y cuando se iba agachar para hacer sexo oral, Rodolfo lo detuvo y le dijo… - Ideay…que te pasa…señor olvidadizo…espérese que aquí yo lo voy a guiar… -

Inmediatamente Rodolfo puso su boca frente al pene de Lalo para hacerle sexo oral, pero ni se imaginaba la sorpresa que le esperaba. Después de grandes minutos de placer para Lalo, Rodolfo se puso de pie y tomo las manos de Lalo para llevarlas a su cintura mientras él levantaba el culo tan apetitoso. Saber que paso la noche anterior ya no era un incógnita para Lalo, ahora lo que quería era saber cómo le había hablado a Rodolfo

Sólo en la cama con Lalo

Un domingo a las 6 de la mañana Lalo no podía seguir durmiendo, a pesar que se durmió de madrugada luego de salir con Javi a “La Esquinita”. Sus ojos se abrían y cerraban cuando se dio la vuelta y se topo con Rodolfo, en ese momento Lalo se levando de la cama muy asustado por ver semejante escena, Rodolfo desnudo con el culo para arriba mostrando su piel morena. Lo raro no era que Lalo amaneciera con un hombre si no que lo hiciera con Rodolfo…

Nadie sabía nada de Rodolfo, ni una historia en el ambiente ni una mamada nocturna…nada. A sus 20 años, era estudiante de policía y cada 15 días regresaba de la Academia MasCulina, se le podía ver con alto uniforme negro y gris, de pelo corto y siempre con el rostro serio a pesar que tenía una mirada muy dulce, con sus pestañas rizadas y sus ojos color miel. Lalo no se acordaba como él y Rodolfo habían amanecido desnudos en la misma cama.

Ve mujer…tengo un hombre desnudo en mi cama – le dijo Lalo a Javí por celular.
Que raro en vos querido…y quien es ahora… - Les respondió Javí.
Te vas a morir…Rodolfo el policía…
Qué? – grito Javí. - ¿Cómo llego ese hombre a tu cama?.
No se mujer…mi casete se borra después que salimos de la esquina…
Hay Dios…quien sabe dónde y cómo lo encontraste que te aprovechaste del pobre…
Ja…o quizás el se aprovecho de mí…pero no me duele nada…
Atrevida que sos – le reprocho Javí…

A pesar que la incertidumbre reinaba en el cuarto de Lalo, este no podía dejar de verle el culo a Rodolfo, era casi perfecto. Lo que más intrigaba a Lalo era saber si había sido pasivo o activo y sobre todo donde se había encontrado con él. De pronto, Lalo se fijo en la mesa de noche y vio las llaves de un caro y una caja de condones, era seguro que habían tenido sexo. A Lalo sólo le quedaba esperar a que Rodolfo despierte para saber que había pasado.

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La ruta del sexo...

Javí estaba ansioso por contarle a Lalo como termino la noche del sábado que salieron en busca de
éxito, más no se imaginaba que Lalo lo superaría con su existo de pocas horas. Todos los días, Javí esperaba a Lalo en la esquina frente a la iglesia que se bajara de la Ruta 69 siempre puntual a las siete de la noche. Ese día, Lalo se tarde un poco más de lo usual por que conoció íntimamente al chofer, quien le cobro con su cuerpo el pasaje.

Una hora antes, Lalo estaba esperando la Ruta en la parada de la KoShón, no había sido un buen día de trabajo pues se había peleado con Roberto e iba algo estresado por eso. Como por inercia, Lalo se movió al bus al escuchar el ruido del bus llegar, eran 15 minutos de viaje pero Lalo estaba tan distraído que no se percato que parada ya había pasado y que el recorrido estaba por terminar, Justo al llegar a la ultima para, el chofer le grita a Lalo que está sentado al frente:

Ohe Maje, aquí es la última parada...
Lalo se asusta y responde - Que...y dónde estoy?
Acá es el Barrio PuntaFina...
A la grande, me pase como tres paradas.
Y de donde sos vos...? - Le pregunto el Busero.
Yo soy de Lomas Xexilia.
Pues fíjate que yo voy a dejar el bus por ahí cerca, si quieres te
doy raid.
Que lindo sería de tu parte - le dijo Lalo.

En el camino se presentaron. El busero se llama Jasón Equino, tenia 28, de piel blanca con buena estatura, con unos brazos inmensos y velludo por todos lados. Lalo no se aguanto las ganas y le pregunto...

Ve...y vos son bien peludo...
Jajaja...y eso que no has visto nada - Le respondió Jasón, el busero.
Vos que no me enseñas - Le respondió Lalo a la insinuación.
De verdad...te animas...

En ese momento la pierna izquierda de Jasón presiono el freno y detuvo el bus en una esquina oscura. Se dio vuelta en la silla del conductor y se desabotono el pantalón seguido del zipper para sacar aquel miembro ya casi erecto que media como 19 centímetros. La reacción de Lalo fue agarrarla inmediatamente pues no perdería por ninguna razón la oportunidad. Jasón se quito la camisa para dejar ver entre las sombras el cuerpo definido que había logrado a punto de trabajo, mientras Lalo solo podía admirar la belleza masculina del busero que tenia desnudo. Poco a poco
fue creciendo la excitación y el bus se convirtió en escenografía de película XXX durante aproximadamente 20 minutos.

Después de 15 llamadas perdidas el celular de Javi sonó, era Lalo para decirle que ya iba, mientras se termina de poner el pantalón. Desde esa noche, hay ocasiones en las que Lalo tiene un viaje expreso de placer con Jasón, el equino...

¿Contás piedras o miras estrellas?

Eran las cinco de la noche, Lalo se baño luego de un día de limpieza en su cuarto, esperaba a Javi que iban de casería por la ciudad. Ellos querían terminar la noche a la par de un hombre, preferiblemente musculoso, blanco, de pelo el pecho y con un monumento entre sus piernas que hiciera de la noche inolvidable.

La noche llego, Javi y Lalo salieron sin rumbo a ver qué encontraban. Pasaron por el ciber en elchat.com a ver si encontraban algo pero la media hora que pagaron no dio resultados. Salieron del ciber medio decepcionados porque ya eran las ocho de la noche y ningún éxito se había atravesado en su camino. Al final se fueron al sentar a una banca del parque, a la misma donde Lalo se había encontrado con el gay indeciso, se acordaron de eso y soltaron una carcajada. Javi ya tenía meses sin acción, mientras que Lalo le contó la experiencia que tuvo recientemente con su vecino.

Vieras vos las pelotas que tiene por huevo ese hombre - le dijo Lalo.
Cállate vos, no ves que yo ando rabiando por un hombre - respondió Javi.
Ve niño y por qué no te metes un pepino...
Un pepino...como me voy a meter un pepino...tas ebria mujer...
Dios...allá viene Carlos.
Miguel...el maje del gimnasio. - Exclamo Lalo.
Que rico ese hombre...y te habla Lalo?
Si. El maje me pone toda su polla cuando voy al gimnasio.
Entonces la presta...
No se, nunca me ha gustado. A vos te gusta?
Pues en medio de esta escases, cualquier gota de agua es buena. - le respondió Javi.

Carlos Miguel era instructor del  Musku-loKa, el gimnasio preferido por los gays de la ciudad, en el que trabajaba hasta las nueve de la noche. Era un maje moreno, con un pecho perfectamente moldeado que no caía en el exceso pero que se miraba apetitoso. Le gustaba ser coqueto y siempre había tenido la curiosidad de experimentar algo nuevo. Muchas veces lo intento pero nunca lo había hecho.

Ohe loco como vas... - Le dijo Lalo a Carlos Miguel cuando paso en frente.
Ohe, no has llegado al gym. Hay nuevos productos que te pueden gustar. - Le respondió.
Si me he perdido, a ver que día te caigo y me desbaratas...
Jajaja... - componente Lalo.
Mira Carlos, este es mi amigo Javi.

Después de una hora, Carlos Miguel se quedo sentado con Lalo y Javi en aquella banca frente a la iglesia en medio de la noche estrellada. No paso nada. Lao y Javi tiraron las indirectas más directas del mundo, pero Carlos Miguel no respondió. Se dieron por vencido y se levantaron para irse a casa, de casualidad Carlos y Javi tenían que tomar la misma ruta.

Y entonces...como vamos a terminar la noche? - Le pregunto Carlos en cuanto se despidieron de Lalo.
Qué? De que estás hablando? - dijo Javi.
Queres o no queres?
Donde sí?
Pues no sé, en tu casa o en otro lado...

Al final terminaron en el campo de fútbol del colegio de la ciudad. Desde que llegaron, Carlos Miguel se apodero de la situación, todo por sorpresa a Javi, lo jalo de la nuca y lo besa mientras bajaba sus manos a la entrepierna. Con mucha desesperación, Carlos Miguel empezó a meter las manos en el pantalón de Javi, quien estaba completamente admirado pues nunca le había pasado algo muy similar. Carlos siguió tocando el miembro de Javi mientras este crecía cada vez más, luego bajo
lentamente besando su pecho hasta posarse frente a la cintura. Las sorpresas continuaron, al final Javi termino mirando estrellitas de placer y Carlos Miguel contando piedritas. Una noche inolvidable para Javi.