Sólo en la cama con Lalo

Un domingo a las 6 de la mañana Lalo no podía seguir durmiendo, a pesar que se durmió de madrugada luego de salir con Javi a “La Esquinita”. Sus ojos se abrían y cerraban cuando se dio la vuelta y se topo con Rodolfo, en ese momento Lalo se levando de la cama muy asustado por ver semejante escena, Rodolfo desnudo con el culo para arriba mostrando su piel morena. Lo raro no era que Lalo amaneciera con un hombre si no que lo hiciera con Rodolfo…

Nadie sabía nada de Rodolfo, ni una historia en el ambiente ni una mamada nocturna…nada. A sus 20 años, era estudiante de policía y cada 15 días regresaba de la Academia MasCulina, se le podía ver con alto uniforme negro y gris, de pelo corto y siempre con el rostro serio a pesar que tenía una mirada muy dulce, con sus pestañas rizadas y sus ojos color miel. Lalo no se acordaba como él y Rodolfo habían amanecido desnudos en la misma cama.

Ve mujer…tengo un hombre desnudo en mi cama – le dijo Lalo a Javí por celular.
Que raro en vos querido…y quien es ahora… - Les respondió Javí.
Te vas a morir…Rodolfo el policía…
Qué? – grito Javí. - ¿Cómo llego ese hombre a tu cama?.
No se mujer…mi casete se borra después que salimos de la esquina…
Hay Dios…quien sabe dónde y cómo lo encontraste que te aprovechaste del pobre…
Ja…o quizás el se aprovecho de mí…pero no me duele nada…
Atrevida que sos – le reprocho Javí…

A pesar que la incertidumbre reinaba en el cuarto de Lalo, este no podía dejar de verle el culo a Rodolfo, era casi perfecto. Lo que más intrigaba a Lalo era saber si había sido pasivo o activo y sobre todo donde se había encontrado con él. De pronto, Lalo se fijo en la mesa de noche y vio las llaves de un caro y una caja de condones, era seguro que habían tenido sexo. A Lalo sólo le quedaba esperar a que Rodolfo despierte para saber que había pasado.