Nunca se lo hubiera imaginado, pero Federico estaba tocando la puerta de su casa, luego que Lalo le hiciera insinuaciones para que tuvieran sexo a raíz de una conversación entre ambos. Esa tarde, Lalo estaba dispuesto a meter un gol con Federico. Hacia un poco de calor y Lalo ya estaba más que listo para toda la batalla que le podía esperar.
El Federico llego con un short de licra flojo y de camisola, que lo hacía ver más sensual sumado a la efervescencia de testosteronas a sus 21 años. La experiencia le decía a Lalo que Federico sólo necesita de un empujoncito para “explorar” del sexo entre hombres. Al momento de entrar en la casa, la ansiedad era la dueña de ambos, que sabían la razón por la que estaban ahí.
Llegaste!!! - Le dijo muy contento Lalo a Federico.
Así es. Aquí me tienes y espero que la pasemos súper por que deje de ir donde los brothers - le respondió Federico con una mirada picara.
Acá me tenés listo para disfrutar de vos...upss...con vos, digo!!!
El pito sono y los primeros 45 minutos del partido empezaron. Lalo miraba asombrado a Federico como él se emocionaba, saltaba y gritaba cada vez que la pelota estaba cerca de la red. Lo peor de todo es que Lalo no encontraba la forma de tocarlo y empezar algún tipo de rose.
De pronto un jugador metió un gol. Federico grito, pero un salto en el aire y cuando puso sus pies en el cielo, agarro a Lalo por los cachetes y lo beso. Lalo se quedo con la mente en blanco ante semejante hecho y lo separo inmediatamente.
Ideay? Qué te pasa? No era eso lo que querías...? - Le pregunta Federico asombrado.
Ay...sí! - Respondió Lalo.
Y qué? Seguimos?
Vos querés?No estaría mal para variar un poco - puntualizó Federico.
Con la narración del partido de fútbol de fondo, esa tarde Federico le metió un golazo a Lalo, en todo el sentido de la palabra…y como ustedes lo quieran interpretar.
El Federico llego con un short de licra flojo y de camisola, que lo hacía ver más sensual sumado a la efervescencia de testosteronas a sus 21 años. La experiencia le decía a Lalo que Federico sólo necesita de un empujoncito para “explorar” del sexo entre hombres. Al momento de entrar en la casa, la ansiedad era la dueña de ambos, que sabían la razón por la que estaban ahí.
Llegaste!!! - Le dijo muy contento Lalo a Federico.
Así es. Aquí me tienes y espero que la pasemos súper por que deje de ir donde los brothers - le respondió Federico con una mirada picara.
Acá me tenés listo para disfrutar de vos...upss...con vos, digo!!!
El pito sono y los primeros 45 minutos del partido empezaron. Lalo miraba asombrado a Federico como él se emocionaba, saltaba y gritaba cada vez que la pelota estaba cerca de la red. Lo peor de todo es que Lalo no encontraba la forma de tocarlo y empezar algún tipo de rose.
De pronto un jugador metió un gol. Federico grito, pero un salto en el aire y cuando puso sus pies en el cielo, agarro a Lalo por los cachetes y lo beso. Lalo se quedo con la mente en blanco ante semejante hecho y lo separo inmediatamente.
Ideay? Qué te pasa? No era eso lo que querías...? - Le pregunta Federico asombrado.
Ay...sí! - Respondió Lalo.
Y qué? Seguimos?
Vos querés?No estaría mal para variar un poco - puntualizó Federico.
Con la narración del partido de fútbol de fondo, esa tarde Federico le metió un golazo a Lalo, en todo el sentido de la palabra…y como ustedes lo quieran interpretar.
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